lunes, 14 de julio de 2008

Meteorología

Antes de conocer los medios para el estudio meteorológico en la Antártida, sería conveniente algunas nociones sobre esta disciplina científica:
La meteorología es una ciencia que estudia la composición, estructura y comportamiento dinámico de la atmósfera y los fenómenos que en ella suceden. Principalmente, el propósito de la meteorología es la predicción del tiempo atmosférico a corto y medio plazo. Estas predicciones son de gran importancia para numerosas actividades humanas. Para ello se basa en el estudio de la atmósfera, en particular de la troposfera.
Sin embargo, en principio en la Antártida esta ciencia no persigue un fin práctico, debido a que la vida humana y tipo de actividad en este continente se limita a los asentamientos científicos, cuya misión es precisamente el conocimiento. Además, en la Antártida los parámetros meteorológicos son exclusivos, es decir, no tienen parangón en otras regiones del planeta, por lo que no podrían ser aplicados fuera de su ámbito sin sufrir notables fracasos.
En el aspecto teórico, la meteorología aplica al estudio de la atmósfera las ecuaciones clásicas de la mecánica de fluidos y la termodinámica. En el primer caso se pretende descubrir la evolución dinámica de los grandes sistemas atmosféricos, y en el segundo se tiene en cuenta los fenómenos de intercambio del calor en las masas de aire, y sus repercusiones en el comportamiento global del sistema en que están inmersos.
Los sistemas de ecuación que intervienen en los cálculos meteorológicos son de orden elevado y contienen numerosos parámetros numéricos e incógnitas; su resolución, por tanto, es laboriosa. El empleo de los métodos numéricos en la predicción del tiempo sólo ha sido posible con la llegada de computadoras de gran potencia, apoyadas en tecnología de observación global por satélite, y regionalmente mediante estaciones automáticas. La necesidad de conocer detalladamente cada estado de la atmósfera para el cálculo posterior de la evolución, implica el de poseer en todo momento un número muy elevado de datos. De aquí que la observación sea un componente esencial de todo estudio meteorológico. En la Antártida, las estaciones meteorológicas son instalaciones fundamentales en cualquier infraestructura que pretenda ser eficaz en sus estudios. Las observaciones y registro del tiempo se realizan realmente desde el siglo 18. La supervisión pormenorizada de los registros antárticos empezaron a finales de 1950 (Nuestro país desde 1904, en la actual Base Orcadas). Por su parte, los observatorios meteorológicos en las zonas polares administran a horas prefijadas gran cantidad de datos relativos a presión, temperatura, humedad de la atmósfera, así como insolación, características de las nubes, precipitaciones, etc., posteriormente estos datos suelen ser intercambiados entre los diferentes observadores, para disponer no sólo de predicciones globales a corto plazo, sino también de una base de datos que, en el futuro, puede ser estadísticamente valioso.

1 comentario:

Maria Lorena Recio dijo...

Amor, que interesante! Es lindo saber porque es que estan ahí y todos los estudios científicos que están haciendo. Gracias por compartir!
Lore

Auroras en la Base Belgrano 2

Ozonosondeo

22 de Febrero - Día de la ANTARTIDA ARGENTINA

El día 22 de febrero se conmemora el Día de la Antártida Argentina y se cumplen 104 años de la permanencia ininterrumpida de los Argentinos en la Antártida
Antártida Argentina o Sector Antártico Argentino, a la que nosotros consideramos parte del territorio nacional, integra una vasta área que ocupa el casquete polar austral y en la que prevalecen condiciones ambientales particulares -distintas a las de América del Sur- las cuales tienen una influencia muy marcada en la presencia y en las actividades del hombre.

Por otra parte, esa zona está afectada a un régimen jurídico especial cuyo ámbito territorial abarca toda el área al sur de los 60º de latitud Sur.

La región antártica delimitada por los meridianos 25º y 74º Oeste y el paralelo 60º de latitud Sur, forma parte del que fuera Territorio Nacional de Tierra del Fuego, Antártida e Islas del Atlántico Sur, establecido por Decreto-Ley Nº 2129 de fecha 28 de febrero de 1957, hoy por ley provincial.

La presencia Argentina en nuestro Sector, según la actividad de los foqueros criollos y de acuerdo con la investigación histórica, se produjo en la segunda década del siglo XIX; aunque algunos afirman incluso que tuvo lugar a fines de dicho siglo.

Eran buques que desde el puerto de Buenos Aires iban a las llamadas actualmente Islas Shetland del Sur en busca de sus presas.

A fines del siglo XIX y principios del siglo pasado, la ayuda prestada por nuestro país a expediciones extranjeras, en particular la de Nordenskjöld, de Gerlache y Charcot, fueron debidamente apreciadas, quedando como resultado tangible toda una serie de nombres argentinos puestos a accidentes geográficos: Isla Uruguay, Islas Argentinas, Roca, Quintana, entre otros.

El 22 de febrero de 1904 se inicia la ocupación permanente de la Antártida Argentina, con el izamiento del pabellón nacional en la Isla Laurie del grupo de Islas Orcadas.

Cabe destacar que durante 40 años la Argentina fue el único ocupante permanente del Antártico, hecho que constituye el mejor aval de nuestros títulos de soberanía en el área.

La presencia Argentina en la Antártida tiene más de un siglo, récord que nos enorgullece, y han sido frecuentes los actos de gobierno y administrativos en relación con nuestras actividades y en defensa de los derechos argentinos.

Los títulos de soberanía de nuestro país sobre ese sector son múltiples, siendo los principales los siguientes:
1. Continuidad geográfica y geológica.
2. Herencia histórica de España.
3. Actividades foqueras desde que éstas comenzaron en la
región.
4. Ocupación permanente de una estación científica que se
mantiene desde comienzos de siglo hasta nuestros días: el
Observatorio Meteorológico y Magnético de las Islas
Orcadas del Sur, inaugurado en 1904.
5. Instalación y mantenimiento de otras bases permanentes
y temporarias en la península antártica e islas adyacentes;
también en la barrera de hielo de Filchner, aparte de
numerosos refugios en distintos puntos del sector.
6. Trabajos de exploración, estudios científicos y
cartográficos en forma continuada.
7. Instalación y mantenimiento de faros y ayudas a la
navegación.
8. Tareas de rescate, auxilio o apoyo, tales como el
salvamento a comienzos del siglo pasado, del eminente
sabio explorador sueco Otto Nordenskjöld y sus
compañeros; el rescate de un enfermo y un accidentado,
ambos ingleses de la apartada estación de Fossil Bluff.
9. Presencia Argentina en tierra, mar y aire en todo el
Sector, inclusive el mismo Polo Sur, alcanzado en varias
oportunidades alternativamente por aviones de la Armada
y de la Fuerza Aérea y por las expediciones terrestres del
Ejército.
10. Apoyo logístico y operativo en forma permanente, a las
actividades científicas a nivel internacional.

Bases Antárticas Argentinas
· Permanentes: Esperanza, San Martín, Belgrano II,
Orcadas, Jubany y Marambio,
· Temporarias: Primavera, Cámara, Decepción, Petrel,
Melchior, Brown y Matienzo

Abastecimiento aéreo

Como obtenemos el agua (leer el artículo que está abajo primero)

Viaje hasta BELGRANO 2